¿Qué es el cáncer de cuello de útero o cáncer de cérvix?
El útero o matriz es un órgano que forma parte del sistema reproductor de
la mujer y está localizado en la pelvis. Consta de dos partes, el cuerpo del
útero, donde se produce el embarazo y el cuello, o cérvix, que conecta la
parte inferior del útero con la vagina.
El cáncer de cuello de útero ocurre cuando las células del cuello del útero
se vuelven anormales y empiezan a crecer de forma incontrolada.
Generalmente tarda mucho tiempo en desarrollarse, más de 10 años, por
lo que se dispone de muchas oportunidades de detectarlo a tiempo de
tratarlo y curarlo. Habitualmente al principio del proceso no da síntomas.
El cáncer de cérvix puede afectar a cualquier mujer de cualquier edad que
tenga o haya tenido relaciones sexuales. La mayoría de los casos ocurren
en mujeres que, por distintos motivos, no se realizan citologías regularmente.
La causa principal del cáncer de cuello de útero es la infección persistente
por el Virus del Papiloma Humano (VPH). Esto quiere decir que en todos
los cánceres de cuello de útero hay una infección previa por el VPH.
La infección por VPH es la infección de transmisión sexual más frecuente
entre las mujeres, y en la mayoría de los casos desaparece al cabo de un
tiempo. En algunas mujeres esta infección no desaparece y por tanto
tendrán más riesgo de desarrollar cáncer de cuello de útero.
Cualquier mujer que mantenga, o haya mantenido, relaciones sexuales,
sin importar su orientación sexual, puede tener el virus y transmitirlo.
El VPH puede transmitirse por contacto genital, aunque no haya coito.
El uso del preservativo tanto masculino como femenino, así como el
cuadrante de látex, en las relaciones sexuales, reduce el contagio y por
tanto la infección por VPH, siendo por ello una de las medidas más
eficaces para protegerse del cáncer de cuello de útero.
Las vacunas para prevenir la infección por VPH protegen, frente a
algunos tipos del virus, a las personas que todavía no han sido infectadas,
Pero sólo protege de dos cepas de todas las que pueden causar el virus y la protección dura sólo 5 años.
La citología cervicovaginal, o test de Papanicolaou, permite la
detección precoz de células cervicales anómalas, que pueden ser
tratadas antes de que el cáncer aparezca.
Citología o Test de Papanicolaou
¿Qué es ?
La citología es una prueba sencilla, rápida y no dolorosa, en la que, con un
instrumento llamado espéculo, se separan las paredes de la vagina para
poder llegar al cuello uterino, de donde se recoge una muestra de las
células.
Posteriormente, estas células son analizadas en el laboratorio con un
microscopio para detectar cualquier posible anomalía.
¿A quién se recomienda?
A todas las mujeres con edades comprendidas entre 25 y 65 años que
tienen, o han tenido, relaciones sexuales.
A las mujeres menores de 25 años que mantienen relaciones sexuales
desde hace más de tres años, y a las mujeres mayores de 65 años que
nunca se la hayan hecho.
A los 65 años si las citologías anteriores han sido normales, no será
necesario repetirlas. Sin embargo tener la menopausia no es motivo para
dejar de hacerse citologías, ya que persiste el riesgo.
Las mujeres vacunadas frente al VPH también deben hacerse pruebas de
detección precoz del cáncer de cuello de útero.
No se recomienda la citología a mujeres que no han tenido nunca
relaciones sexuales ni a aquellas a las que se les ha realizado una
extirpación del útero por un proceso benigno.
¿Con qué frecuencia debe hacerse una citología?
Como recomendación general, después de dos citologías anuales
consecutivas normales las siguientes deben realizarse cada tres años.
¿Dónde se realiza la citología?
La citología puede realizarse en centros de salud, centros de orientación
familiar o consultas de ginecología. Según el lugar a donde acuda, le
atenderán profesionales diferentes: personal médico, de enfermería o
matronas.
¿Qué es necesario tener en cuenta antes de hacerse
una citología?
Para que la citología pueda ser bien valorada debe tenerse en cuenta:
- No realizarla durante la menstruación
- No utilizar medicamentos administrados por vía vaginal, durante los
tres días anteriores a la citología.
- No mantener relaciones sexuales con penetración vaginal en las 48
horas previas a la realización de la citología
Si le corresponde hacer la citología durante el embarazo informe al
personal sanitario
¿Cuál puede ser el Resultado?
La mayoría de las mujeres tienen una citología normal. En este caso deben
continuar realizándose citologías con la periodicidad que les corresponda.
Algunas mujeres, tendrán un resultado no valorable y deberán repetir la prueba.
Algunas mujeres, 4 ó 5 de cada 100, tendrán una citología anormal. Es muy
importante saber que tener una citología anormal no significa tener cáncer.
La mayor parte de las mujeres con un resultado anormal en la citología no
requieren tratamiento, aunque algunas de ellas sí lo necesitarán.
Si en su citología se encontrara alguna lesión es fundamental seguir las
recomendaciones que se le indiquen.
Si tiene dudas sobre las pruebas que debe realizar o sobre los resultados
de las mismas, anótelas y pregúntelas durante su próxima visita.
EL MEJOR TRATAMIENTO DEL CÁNCER ES LA PREVENCIÓN
By Dra. Inma González
www.novadona.com