lunes, 24 de febrero de 2014

"La Afabilidad: un medicamento que va liberando su propio principio activo"

LA AFABILIDAD, un medicamento que va liberando su propio principio activo”

 “Él se preguntaba hasta qué punto es eficaz la terapia o la terapeuta. La afabilidad exquisita con que lo trata. LA AFABILIDAD, un medicamento que va liberando su propio principio activo”
Pág. 12 de LA TERAPEUTA, Gaspar Hernández



La afabilidad aquello que no todos los médicos conocen: no está reñida con el conocimiento. El cual es bien diferente de la sabiduría. El conocimiento por sí solo no trae beneficio, porque también es necesario ser prudente y sabio para saber cuándo hacer uso de él. El conocimiento está muy orgulloso de todo lo que sabe, mientras que la sabiduría sigue siendo muy humilde por lo poco que sabe. El siguiente paso después de la cognición, es aprender a aceptar. Aceptar que no somos dioses que poseemos el conocimiento sino que estamos al servicio de nuestros pacientes, a los que hemos de conservar (mejor) o devolver su salud, porque sólo a ellos pertenece. Debemos enseñarles a aceptar y convivir con la enfermedad si ésta se produce, eso sí dándoles los medios para alcanzar la salud del modo más natural, evitando iatrogenias, efectos secundarios o calvarios innecesarios.

Lo más importante es enseñar con el ejemplo. Llevando una vida sana, una alimentación equilibrada, haciendo desayunos de rey, comida de príncipe y cena de mendigo. Practicando ejercicio. Conservando un aspecto agradable y natural a pesar de la edad. Para que seamos el espejo en el que se miren. Recuerda que el naturista es el que vive como un enfermo para morir sano.


La primera visita con el paciente es clave, es cuando se realiza la conexión. Después de dejar que ell@s expliquen su problema y sus expectativas (las visitas de Medicina Integrativa duran una hora), nosotros proponemos un plan de tratamiento que va a incluir muchos aspectos, no sólo químicos sino cambios de hábitos e incorporación de nuevas rutinas imprescindibles para recuperar la salud o conservarla. Pero de esta primera entrevista, el paciente debe haber visto en tus ojos un “sí, puedo ayudarte”. Para ello el médico tiene que haberlos levantado del papel y con una amplia sonrisa dedicarte una mirada de apoyo hacia todo aquello que le explicas. Afabilidad es estado puro. Así se consigue llevar un centro médico por más de 20 años.



Soy médico, estos días hace 22 años que abrí el Centro de salud que dirijo, en el que hacemos una Medicina Integrativa, es decir tratamos a los pacientes de modo holístico, desde los aspectos más emocionales a los más superficiales para algunos: los problemas estéticos. Es estos años hemos ido incorporando a nuestro arsenal terapéutico distintas disciplinas: homeopatía, fitoterapia, Terapia Neural...Sin olvidar las actualizaciones en Medicina Estética: Dermoabrasiones, implantes faciales, botox, tratamientos anticelulíticos...Todo esto lo conjugamos bien porque para nosotros la prevención de la salud es fundamental, mediante la alimentación sana, el ejercicio, el control del estrés y la gestión de las emociones, las terapias de drenaje y detoxificación periódicas son la base de la belleza que da la salud.

Tenemos mucha experiencia en el tratamiento holístico de la menopausia, por eso muchas mujeres que sufren los síntomas nos consultan para que, de un modo más fisiológico y natural les ayudemos a controlarlos y les dirijamos en un camino de salud hacia la vejez.




También tratamos problemas de peso mediante un tipo de Nutrición Comportamental, en el que se trata no sólo el “hambre física” sino el “hambre emocional”. Es un tipo de terapia en la que la motivación y participación del/a paciente es fundamental para perder peso. Por eso se estudian los factores emocionales que le han llevado a ganarlo y los medios que se van a poner para perderlo. Nosotros somos una parte de apoyo para que sea el paciente el que gestione las emociones negativas diarias, aumente su autoestima y se reconcilie con las sensaciones corporales. Para ello es necesario un “Jogging Mental” en el que la afabilidad es un lubricante importante para que el engranaje funcione.

Tengo la suerte que me apasiona mi trabajo y obtengo una recompensa más allá de la económica, mi trabajo da sentido a mi vida. Ofrecer tu experiencia (sabiduría?) a los demás y obtener su mejor sonrisa, ofrecer lo mejor de ti misma y como recompensa obtener el bienestar, la salud y la belleza ajenos es un privilegio del que pocos pueden disfrutar.

Creo en la necesidad de tener FE en el diagnóstico, ESPERANZA en el pronóstico y CARIDAD en el tratamiento, todo ello cargadito de AFABILIDAD en la hoja de ruta que juntos, médico y paciente deben recorrer.

By Dra. Inma González para “Ella y el Abanico”
Novadona Espai de Salut